Cada actividad de este retiro ha sido elegida y diseñada especialmente para brindarte una experiencia de relajación, reflexión y recarga de energía, que contribuya en tu camino de reconocer y dejar fluir las emociones de manera consciente, además de darte herramientas que puedas aplicar en tu vida cotidiana, de regreso a casa.

Realizaremos prácticas de yoga y meditación diarias, enfocadas en balancear los centros energéticos o chakras inferiores, asociados a diferentes tipos de emociones.

Compartiremos charlas para entender qué son los chakras, las emociones y cómo manejarlas desde la filosofía ancestral del Yoga.  Realizaremos además talleres de reflexión personal para aterrizar las herramientas que exploraremos a tu situación de vida particular.

Dedicaremos tiempo para entrar en contacto con los elementos primordiales de la naturaleza: el agua purificadora del océano, el fuego transformador, el aire que fluye a través del sonido de instrumentos tradicionales en la playa y a la luz de las estrellas.  Y finalmente la tierra, en contacto con nuestros pies y manos a través de la siembra de mangle y una ceremonia Kogui de agradecimiento a la Madre Tierra.

La labor de siembra también tiene el propósito de servir y regresar algo de la generosidad que nos ofrecen la naturaleza y los lugareños, así como de cultivar cualidades de humildad y desapego.  Es una práctica de Karma Yoga, o servicio voluntario desinteresado.
 
Disfrutarás de una deliciosa alimentación vegana, una combinación única de platos y sabores tradicionales colombianos junto con recetas del mundo entero, que apoyan a las comunidades vecinas con el uso de ingredientes locales.

No requieres ninguna experiencia previa en yoga ni en meditación, solamente el deseo de regalarte un espacio fuera de la rutina, en contacto con la naturaleza y con otros seres maravillosos que están en el mismo camino de descubrimiento que tú.